Por esos caprichos que la Naturaleza tiene de vez en cuando, pues mire usted, en esta ocasión le ha dado por llevar varios meses sin llover en esta bendita tierra y más concretamente en la Comarca de Gudar-
Deprisa y corriendo hubo que improvisar sustituir el recorrido y como Asun Royo y Ángel Lahuerta tenían encomendada la excursión de Octubre por su pueblo natal (Moyuela) se ofrecieron gustosos a intercambiar las fechas. La organización de L’Andada no se lo pensó dos veces y con la única condición de que nos aseguraran buen tiempo para el día de la excursión, comenzamos a organizar todo lo necesario.
¿Buen tiempo? Menudos son Asun y Ángel. ¿Queréis buen tiempo? Pues os vais a hartar de sol y calor. Buenos somos los de Moyuela cuando nos ponemos. Así pues, una vez desayunados en los dos bares del pueblo, comenzó la caminata cuyo trazado por esta comarca del río Aguasvivas (por cierto también sin agua) enseguida nos hizo percatarnos que íbamos a sudar la camiseta de lo lindo. Tan es así que incluso se recortó algo el recorrido preparado con tanto mimo por nuestros guías, por miedo a deshidratarnos y como además una vez terminada la excursión teníamos visita guiada por Moyuela y sus bares estaban bien provistos de cerveza fresca y buena sombra, pues ¡hala! ya volveremos en otra ocasión para realizar un recorrido con un poco menos de calor.
Asun nos acompañó “a la pata coja” a visitar las iglesias, ermitas y el mirador “del gallico de Moyuela” desde donde se tienen unas bonitas vistas de Moyuela y sus alrededores. Una vez terminada la visita y bien hidratados, nos fuimos a comer a Muniesa donde el Hostal “Rosa Mari” nos sorprendió gratamente con una espléndida comida que como siempre fue amenizada con la algarabía ya clásica de nuestras buenas gentes de L’Andada que lo mismo valen para caminar, que para comer, que para charrar sin descanso las horas que haga falta.
Un pequeño paseo por Muniesa para admirar su magnífica torre mudéjar (Patrimonio Mudéjar de la Humanidad), los lavaderos (con dos entrañables abuelicas lavando “sus cuatro cosas”) y el Calvario, para dar por terminada la jornada, regresando a Zaragoza y despidiéndonos hasta Septiembre para reanudar nuestras excursiones.
FELIZ VERANO A TODOS Y HASTA SEPTIEMBRE